Isemay 40.13
- ¿Me echaste de menos?- fue el reproche que oyeron, acompañado de una sonrisa- No sabía que Olaft tenía calor, sino mamá le hubiera llevado a la bañera- rió con él mientras le tapaba con una manta que una de las doncellas había llevado corriendo al ver lo que había ocurrido. - Mamá, estuve haciendo puchas cosas, fui a ver a los papayos, era uno muy grande, con la lengua como el fuego, y echaba babas, incluso reía…- Comenzó a hablar el niño. - Me lo contarás luego, ¿De acuerdo?- Le interrumpió poniéndole un dedo sobre los labios para silenciarle- Ahora mamá tiene que cambiarte de ropa, o cogeremos un resfriado- rió al ver que el niño se miraba por primera vez como si no hubiera sido consciente de lo que había hecho. - Vale- dijo por fín comenzando a tiritar del frío, mientras sus labios comenzaban a tomar un color azulado. - Despídete d